Éste es un libro de historia del análisis y de las ideas económicas en España en el periodo 1834-1874, en el que tuvo lugar la llamada revolución liberal, con la consagración definitiva de los derechos individuales fundamentales, en la forma que los definió Tomás y Valiente, es decir, con un fuerte contenido económico: libertad, entendida no sólo como libertad política, sino también como libertad económica; igualdad, entendida como igualdad ante la ley y, en particular, como igualdad ante la hacienda pública; y propiedad privada, frente a cualquier otra forma de propiedad.
En él se estudia, principalmente, el papel desempeñado por los economistas académicos en las Cortes españolas en la realización del programa de creación del marco institucional liberal, de una forma similar a como lo han hecho Fetter para Inglaterra, Augello y Guido para Italia, o Bastien y otros para Portugal. Durante estos cuarenta años, pasaron por el Congreso de los Diputados o por el Senado un total de 57 economistas que, o bien eran profesores de Economía Política en alguno de los centros superiores de enseñanza de la Universidad española, o bien pertenecían a alguna de las Academias científicas en que se cultivaba entonces la economía, particularmente la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, uno de los grandes foros de debate económico de la España isabelina.
En este tiempo, salvo en las situaciones revolucionarias, la reina, en su papel moderador, era la intérprete de la opinión pública y arbitraba las crisis políticas, que se producían con relativa facilidad, debido a que los partidos políticos estaban integrados por facciones, con sus correspondientes jefes de filas y clientelas, que amenazaban con su disidencia en caso de que no atendieran sus peticiones. Fue este sistema político el que dio una gran libertad en sus intervenciones parlamentarias a diputados y senadores, sobre todo a aquéllos que eran encasillados por su prestigio científico, como fue el caso de muchos de los economistas que llegaron a las Cortes. Y es precisamente por ello, por lo que estas intervenciones, realizadas sin una terminante obediencia política, resultan hoy relevantes para la historia del análisis y de las ideas económicas en España.