Edward Tulane es un conejo de porcelana amado por una niña de bien. En un viaje a través del océano, el conejo se cae por la borda del barco y es rescatado por un pescador. Viaja durante mucho tiempo con los vagabundos y hasta trabaja durante poco tiempo de espantapájaros. Siempre escucha las esperanzas, sueños e historias de los demás. Aprende a amar, a perder, y a amar de nuevo.