Felicia Swift no imaginaba que volvería a oír una voz de su pasado, grave y sensual, en el pueblecito de Fool’s Gold, California. La última vez que Gideon Boylan le había susurrado al oído había sido al otro lado del mundo, después de la noche más apasionada de su vida. Su prodigiosa inteligencia había limitado las posibilidades de Felicia de hacer amigos y encontrar el amor. Había llegado a Fool’s Gold buscando una vida normal, pero Gideon, tan guapo y misterioso, era cualquier cosa menos normal.
Su pasado en los servicios de operaciones especiales del Ejército había enseñado a Gideon que el amor podía ser mortal. Fingía estar integrado, pero mantenía a todo el mundo a distancia. Felicia ambicionaba cosas que él no podía ofrecerle: un hogar, una familia, amor, pero tenía mucho que aprender sobre los hombres... y quería que fuera Gideon quien se lo enseñara.
Cuando aquellas dos personas inadaptadas descubrieron que la pasión no era lo único que tenían en común, comprendieron también que jamás había que separar a dos almas gemelas.